¿Cuál es la receta perfecta para un viaje por carretera? Una buena cucharada de puertos de montaña, colinas y vistas al agua. Añade un chorrito de curvas, un puñado de vistas panorámicas y una pizca de sitios en los que detenerse para una pausa gastronómica o un breve paseo, todo ello acompañado de una selección de hoteles de lujo en los que descansar. Con estos ingredientes, en Suiza podemos vivir un viaje por carretera que saborear como si fuera una fondue, servida en un formato que se puede disfrutar de una vez o en pequeños bocados.
Una ruta llena de sitios destacados
En los 1.600 kilómetros, 22 lagos y cinco puertos alpinos a más de 2.000 metros del Grand Tour Suiza se van sucediendo los puntos destacados como las perlas de un collar. La ruta pasa junto a glaciares, recorre emblemáticas carreteras de montaña, lagos rodeados de palmeras, rústicos pueblos y modernos hoteles de lujo.
Para completar el tour, que rodea todo el país helvético, se necesitan nueve días. ¿No tienes tanto tiempo disponible? No hay problema. Además del tour por Suiza clásico presentamos un plan de viaje para los que solo tienen cinco días libres o un fin de semana largo. Y aquí tenéis nuestra recomendación especial del menú: el BMW Serie 8 Coupé es el complemento perfecto para cualquier ruta en coche por Suiza.
Esta ruta de 1.600 km por Suiza es un tratamiento de bienestar completo para los aficionados a viajar en coche. En esta ruta, que cruza un puerto de montaña como el Paso de San Gotardo y discurre junto a 22 lagos, podrás descubrir 12 lugares Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO.
Día 1: Zúrich – San Galo (aprox. 150 km)
Puntos destacados de la etapa: tras pasar las cataratas del Rin, las más grandes de Europa, la carretera atraviesa el pintoresco pueblo de Stein am Rhein en dirección a San Galo. No necesitarás un mapa de carreteras para llegar: todos los tramos están señalizados oficialmente. Cuando llegues a tu destino, podrás explorar la encantadora ciudad peatonal de San Galo. Para culminar este primer día de viaje, recomendamos visitar el restaurante Einstein Gourmet, con dos estrellas Michelin.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Militärkantine. Este edificio de 1911 se reformó y se convirtió en hotel en 2014. Desde las 21 habitaciones se puede disfrutar de vistas únicas de la ciudad, del parque Kreuzbleichepark y de las colinas cercanas.
Día 2: San Galo – Davos (aprox. 160 km)
Puntos destacados de la etapa: después de pasar por Appenzell y Maienfeld, pondrás rumbo a Davos, en el cantón de los Grisones. ¿Te apetece parar para dar un paseo por las características montañas de Appenzell? Aquí podrás visitar la famosa cabaña de Aescher-Wildkirchli o la falla tectónica de Sardona. Punto destacado para los gourmets: una cena en el galardonado local Glow by Armin Amrein.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: tanto tú como tu coche podéis pasar la noche con vistas a los Alpes en el Ameron Swiss Mountain Resort. Este hotel de lujo tiene su propia exposición de arte (➜ Cómo comprar arte) con casi 1.000 obras. Y en la zona del spa, de 850 m2, podrás recuperar fuerzas para la siguiente etapa.
Día 3: Davos – Lugano (aprox. 290 km)
Puntos destacados de la etapa: el recorrido a través de Engadina en dirección a la ciudad suiza de las palmeras junto al lago de Lugano es una de las etapas reinas de este tour. Te esperan atracciones como el pueblo de Guarda (el lugar originario del personaje tradicional suizo Schellen-Ursli), el Parque Nacional Suizo junto a Zernez, un paseo por Muottas Muragl, la mundialmente famosa localidad de St. Moritz (con cuatro restaurantes con estrellas Michelin), los lagos de Alta Engadina, una pequeña pausa en los baños termales de Andeer y el Paso de San Bernardino. Para rematar el día, una cena con vistas al lago en la Galleria Arté al Lago.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: la Villa Principe Leopoldo en la Collina d'Oro. Esta antigua y lujosa mansión es parte de la colección Relais & Chateaux y ofrece unas vistas del lago excepcionales.
Día 4: Lugano – Zermatt (aprox. 215 km)
Puntos destacados de la etapa: este tramo es perfecto para entusiastas del volante y la gastronomía (➜ otro artículo interesante: Ruta gastronómica por California). Después de dar un paseo junto al lago en Ascona, podrás disfrutar de un almuerzo en Bellinzona, en el galardonado establecimiento Locanda Orico. A continuación puedes visitar los tres castillos de la localidad, declarados Patrimonio de la Humanidad. El punto fuerte de la etapa (en todos los sentidos) es el recorrido por la Tremola, el trayecto más representativo de los Alpes. Desde Airolo, esta ruta asciende hasta el Paso de San Gotardo y hacia el puerto de Furka. Otros sitios donde merece la pena parar son el palacio Stockalper o el pabellón de hielo de Saas-Fee, desde donde se puede echar un vistazo al glaciar homónimo.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Cervo Mountain Boutique Hotel. En el solárium de este complejo sostenible de ocho chalets, podrás disfrutar de un aperitivo con magníficas vistas al Matterhorn. Nota importante: en el pueblo de Zermatt no pueden entrar los coches, así que hay que aparcarlos en Täsch, a cinco km. Desde ahí hay que coger un tren lanzadera.
Día 5: Zermatt – Montreux (aprox. 150 km)
Puntos destacados de la etapa: desde Täsch, y siguiendo el Ródano por el cantón del Valais, la ruta atraviesa Sion y Martigny hasta llegar a Montreux. Tómate tu tiempo y descubre las imponentes montañas que rodean Zermatt, el castillo de Leuk, el Gornergrat, las aguas termales de Leukerbad, el Lac Souterrain (el mayor lago subterráneo del continente) o las vistas panorámicas desde el Kuklos.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Grand Hôtel du Lac, de Relais et Château. Está en la orilla del lago Ginebra y es un hotel de cinco estrellas superior en el que se combina un refinado modernismo con el lujo actual. ¿Tienes hambre? Hay cuatro restaurantes con estrella Michelin cerca del hotel.
Día 6: Montreux – Ginebra (aprox. 93 km)
Puntos destacados de la etapa: desde Montreux, la ruta atraviesa la región vitivinícola de Lavaux y la ciudad de Lausana para llegar a Ginebra. El trayecto es breve, lo que te dejará más tiempo para explorar los alrededores. Recomendamos visitar las terrazas de viñedos sobre el lago Ginebra, declaradas Patrimonio de la Humanidad. Los viajeros más sibaritas podrán descubrir delicias gastronómicas en el Auberge du Lion d’Or de Cologny.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Jiva Hill Resort, situado en una finca privada de 40 hectáreas. En rigor, el resort está en Francia, pero da igual: estamos en modo «roadtrip».
Día 7: Ginebra – Gstaad (aprox. 157 km)
Puntos destacados de la etapa: tras pasar por la ciudad de Friburgo y su puente (parada culinaria recomendada en Des Trois Tours) y el distrito de Gruyère, la ruta termina en Gstaad. Imprescindibles: la pintoresca ciudad de Neuchâtel, el lago de Biel, la isla de San Pedro, la fábrica de chocolate Cailler, el mirador de Le Moléson y el lago Lauenen. La mejor escapada gourmet para cenar es al restaurante con estrella Michelin Sommet.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el The Cambrian Hotel en Adelboden. La joya de este hotel de diseño es su piscina infinita con vistas a los Alpes.
Día 8: Gstaad – Lucerna (aprox. 315 km)
Puntos destacados de la etapa: la ruta llega a Lucerna tras pasar por Interlaken, Berna, el valle del Emme (Emmental), la comuna de Entlebuch y atravesar el lago de los Cuatro Cantones. Por el camino, se puede visitar el lago de Brienz, el lago de Thun, divisar los picos de Eiger, Mönch y Jungfrau, explorar el casco antiguo de Berna y la piscina fluvial de Marzili o contemplar el castillo de Hallwyl y su foso.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Bürgenstock Resort a las afueras de la ciudad. Como recompensa a esta larga etapa te espera una de las piscinas más impresionantes de Suiza, con vistas al lago Lucerna.
Día 9: Lucerna – Zúrich (aprox. 140 km)
Puntos destacados de la etapa: tras cruzar el lago de los Cuatro Cantones y pasar Altdorf y Schwyz, nos dirigiremos de vuelta a Zúrich. Podemos encontrar un último paraíso para los aficionados a la gastronomía en el restaurante Prisma, dentro del increíble Park Hotel Vitznau, siempre con vistas al lago.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Atlantis by Giardino, a los pies del monte Uetliberg, en Zúrich. Al terminar esta ruta, qué mejor para ti y para tu coche que respirar hondo en este frondoso oasis antes de volver a casa.
Multifacético y compacto: en este Grand Tour Suiza (➜ Las 70 mejores canciones para el coche) descubrirás lo más destacado de Suiza en cinco días: magníficos paisajes de lagos y montañas, puertos alpinos, lugares Patrimonio de la Humanidad de la UNESCO, preciosas carreteras junto a lagos y visitas gastronómicas.
Día 1: Lucerna – Andermatt (aprox. 150 km)
Puntos destacados de la etapa: las carreteras junto a lagos se van alternando con puertos de montaña alpinos en esta ruta que atraviesa el lago de los Cuatro Cantones hacia la localidad de Andermatt, en la montaña: solo tienes que seguir las señales oficiales del Grand Tour. Uno de los puntos más destacados de la etapa es el trío de pasos de montaña que forman el puerto de Furka, el de Susten y el de Grimsel. Para los sibaritas, merece la pena una visita al galardonado restaurante Focus en Vitznau o al RICO’S en Küssnacht.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el The Chedi Andermatt a 1.447 m de altura. En este hotel de cinco estrellas, la elegancia alpina se combina con un aire asiático. El establecimiento dispone incluso de un mayordomo de esquí especial para esta escapada a Suiza.
Día 2: Andermatt – Montreux (aprox. 185 km)
Puntos destacados de la etapa: la ruta recorre la región vitivinícola del valle del Ródano y atraviesa Sion y Martigny en dirección a Montreux. Reserva tiempo para una visita al castillo de Leuk, las aguas termales de Leukerbad, el Lac Souterrain (el mayor lago subterráneo de Europa) o un paseo por la garganta del Trient.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Fairmont Le Montreux Palace. El verdadero lujo en esta joya de la Belle Époque son las vistas al lago Ginebra.
Día 3: Montreux – Neuchâtel (aprox. 155 km)
Puntos destacados de la etapa: la ruta continúa por Lausana y el Col du Marchairuz hacia los viñedos de Lavaux junto al lago de Neuchâtel. Asegúrate de tener tiempo libre en esta etapa: visita el Museo Internacional de la Relojería «Musée International de l'Horlogerie» en la ciudad relojera de La Chaux-de-Fonds, declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. En el museo se exponen más de 4.500 piezas, incluidos 2.700 relojes.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Beau Rivage Hotel está situado en la Esplanade du Mont-Blanc, a orillas del lago. Desde aquí podrás recordar los mejores momentos del viaje mientras contemplas el lago y los Alpes del Oberland bernés.
Día 4: Neuchâtel – Gstaad/Saanen (aprox. 200 km)
Puntos destacados de la etapa: dirígete al Jura, continúa por Broc y Gruyère hasta Gstaad/Saanen. Merece la pena parar en la ciudad fluvial de Friburgo y comer en el galardonado local Des Trois Tours. Entre el resto de atracciones de la etapa se encuentran el lago de Biel, la isla de San Pedro, el mirador de Le Moléson y el lago Lauenen. ¿La mejor dirección que meter en el GPS para disfrutar de una buena cena? Recomendamos el MEGU o el Chesery: estos dos restaurantes de Gstaad tienen estrella Michelin.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: The Alpina Gstaad. En este refugio alpino podrás recargar tus pilas en el lujoso Six Senses Spa antes de regresar a Lucerna.
Día 5: Gstaad/Saanen – Lucerna (aprox. 240 km)
Puntos destacados de la etapa: Interlaken, Berna y el valle del Emme invitan a descubrir la ruta de vuelta al lago Lucerna. Entre otras paradas recomendables se encuentran el lago de Brienz, el casco antiguo de Berna (y quizás un baño rápido en las frías aguas del Aare) o el castillo de Hallwyl y su foso.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Bürgenstock Resort, con vistas al lago de los Cuatro Cantones. En este hotel de lujo, justo a las afueras de la ciudad, puedes poner la guinda al viaje con un baño en una de las piscinas más impresionantes de toda Suiza.
Esta versión del Grand Tour Suiza para un fin de semana largo incluye todos los puntos destacados de Suiza en una fórmula reducida: lagos de montaña, carreteras junto a los lagos, puertos alpinos y restaurantes galardonados. Un menú perfecto para los conductores sibaritas y aficionados a las curvas.
Día 1: Zúrich – St. Moritz (aprox. 270 km)
Puntos destacados de la etapa: después de almorzar en «The Restaurant» en el Dolder Grand (la visita al palacio en el que se encuentra este lujoso hotel ya justifica por sí misma el trayecto hasta el pueblo de Adlisberg, a las afueras de Zúrich), la ruta se dirige a través de Appenzell, Bad Ragaz, Davos y el puerto Flüela hacia Engadina. En esta zona tampoco hacen falta mapas: todos los tramos están señalizados oficialmente.
En el menú de las atracciones de esta etapa están el Ebenalp y la famosa posada de montaña de Aescher-Wildkirchli, las siete cumbres del Churfirsten, el castillo de Werdenberg, la casa de Heidi en Maienfeld, la falla tectónica de Sardona y el Ruinaulta (o Rheinschlucht), el puente de Salginatobelbrücke, el castillo de Tarasp en la Baja Engadina y los baños minerales de Bogn Engiadina.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Badrutt’s Palace. Este icónico hotel se eleva junto al lago St. Moritz como el castillo de Hogwarts. Harry Potter aún no ha llegado, pero en el restaurante IGNIV de Andreas Caminada (➜ Ganadores de los premios ECKART), el personal de cocina ha conjurado una estrella.
Día 2: St. Moritz – Lugano (aprox. 193 km)
Puntos destacados de la etapa: la ruta desde los lagos montañosos de Engadina, por el Paso de San Bernardino y hacia la ciudad de Lugano muestra la diversidad del paisaje suizo. Una de las paradas más bellas del camino es el mirador de la curva de Montebello. El ferrocarril rético cruza aquí la carretera y desde este punto se pueden divisar el Piz Bernina (4.049 m), el Piz Palü (3.901 m) o el Piz Roseg (3.937 m). Además, hay otras atracciones a lo largo de la ruta: la garganta de Viamala, una pequeña parada en los baños termales de Andeer, los tres castillos de Bellinzona, los magníficos jardines del Parco Botanico del Gambarogno o una opípara cena en la Galleria Arté al Lago a orillas del lago Lugano.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Grand Hotel Villa Castagnola. Tómate algo en la terraza junto al lago y brinda por la experiencia del viaje.
Día 3: Lugano – Zúrich (aprox. 300 km)
Puntos destacados de la etapa: tras una breve parada en Ascona, sigue la sinuosa ruta por el paso de Tremola, el paso de San Gotardo y el puerto de Furka, deja atrás Lucerna y dirígete hacia Zúrich. Un viaje de placer en todos los sentidos: desvíate por la carretera junto al lago para cenar en el Restaurant Prisma en el imponente Park Hotel Vitznau.
Dormir en un hotel de lujo – aparcar durante la noche: el Dolder Grand, sobre la cumbre del Adlisberg. Al final de este viaje de cuento de hadas te espera una noche en este castillo de lujo con vistas al lago Zúrich, con su propia colección de arte, un elegante spa y un restaurante galardonado.
Información de viaje
El Grand Tour Suiza (Gran Ruta de Suiza) se puede recorrer en ambos sentidos, pero la Federación de Turismo del país helvético recomienda hacerlo en el sentido de las agujas del reloj. Normalmente, para esta ruta se evitan las autopistas, y solo se utilizan si las condiciones del tráfico lo requieren. El trayecto está señalizado oficialmente.