WLTP: ¿para qué sirve?
El procedimiento precursor, NEDC, desarrollado en los años 90, se había quedado totalmente anticuado. Por este motivo, la ONU se decidió a desarrollar un nuevo procedimiento de pruebas. A continuación, se efectuó un análisis durante varios años realizando pruebas en más de 750.000 kilómetros en tres continentes (Asia, Europa y EE. UU.).
Tras analizar los datos, se pudo desarrollar el procedimiento de pruebas que entró en vigor el 1 de septiembre de 2018 para todos los vehículos nuevos Las nuevas pruebas deben contribuir a obtener unos datos de consumo más precisos y realistas. Además, en las pruebas se consideran también los vehículos híbridos y eléctricos.
WLTP: ¿qué países participan?
Con la nueva norma WLTP, los datos de consumo de los coches serán más realistas.
¿Qué cambia en el procedimiento de pruebas?
El nuevo procedimiento de pruebas WLTP será mucho más realista. Se endurecerán la duración y distancia de las pruebas, así como los tiempos de parada. Otra novedad: los vehículos híbridos y eléctricos se someterán a una prueba específica: la fase urbana. Otros cambios importantes: se tendrán en cuenta también configuraciones individuales de vehículos, como por ejemplo, los neumáticos o los asientos deportivos.
En resumen, gracias a las nuevas mediciones los resultados de las pruebas serán más claros y comprensibles para cada tipo de vehículo. ¿Qué ha cambiado de NEDC a WLTP? Descúbrelo aquí.
La estructura de las nuevas pruebas WLTP en comparación:
Ya no existen las fases de las pruebas anteriores de NEDC (interior, exterior, combinado). El nuevo procedimiento de pruebas WLTP para medir el consumo de combustible y las emisiones de CO2 de los coches es mucho más dinámico. Así son los distintos ciclos:
Así eran las pruebas NEDC:
Así son las pruebas WLTP:
Novedad: datos de vehículos individuales
Con WLTP, los datos son sobre todo mucho más realistas. En los resultados de las pruebas nuevas se consideran también, por ejemplo, configuraciones de vehículos individuales, como por ejemplo, los accesorios. También se tienen en cuenta el tipo de transmisión, el peso del vehículo, la resistencia a la rodadura, las llantas y la aerodinámica del coche.