Menos es más
Antes de salir de viaje en coche con niños, los padres deberían planificar el trayecto a la perfección. Para evitar que los pasajeros pierdan los nervios, no se debería conducir más de 500 km al día. Durante ese recorrido es posible mantener entretenidos a los niños sin llegar a arrepentirse de haber salido de viaje. Las áreas de descanso con zona de juegos son parada obligatoria.
En el momento y lugar adecuados
Si es posible, deberías evitar salir con el coche al inicio o al final de las vacaciones. Los atascos son molestos, pero con niños aburridos en el asiento trasero pueden llegar a ser una verdadera prueba de paciencia. Es preferible pasar primero un día de vacaciones tranquilos en casa para evitar así los atascos.
Salir antes, llegar antes
Si puedes, deberías salir ya antes del amanecer. Los niños están todavía cansados y van medio dormidos y tranquilos durante los primeros kilómetros, mientras que los padres pueden avanzar rápido por las carreteras todavía vacías. Genial. Con niños pequeños es aconsejable aprovechar también la hora de la siesta.
Aperitivos para emergencias
Con el hambre llega el mal humor. Esto le ocurre al 99 % de los niños. Por suerte, funciona también al revés y se puede sobornar fácilmente a los niños con comida. Por ello no basta con planear descansos para comer en el momento adecuado, sino que también debemos preparar siempre algo para picar. Lo ideal sería una buena cantidad de fruta y verdura picada, pero no te olvides de echar galletas y golosinas para los momentos especialmente críticos.
Parada para el pipí
En los descansos, ni te molestes en preguntar a los niños si tienen que ir al servicio, mándalos allí directamente. Para mayor seguridad, los padres deberían echar ropa de repuesto en una bolsa accesible para los viajes largos en coche, al igual que hacen en las excursiones. Esto también puede ser muy útil cuando hace mucho calor o frío.
El coche, una zona de juegos
Los niños están más tranquilos cuando ellos mismos consiguen entretenerse. El equipamiento básico incluye papel, bolígrafo (no rotuladores, ¡piensa en el cuero!), libros para pintar y con ilustraciones y algunos juguetes para el coche. Si el ambiente decae, los padres deben pensar en algo rápido: Canciones, cuentos y juegos para el coche, como por ejemplo, contar los coches de la marca BMW que pasen... O simplemente encender el navegador: algunos modelos vienen equipados con la voz de héroes de dibujos animados, ¡a los niños les encanta!
Cuando nada funciona, la tablet lo hará
Sin televisión, tablet o smarphone – una idea idílica para unir más a la familia. Por pocas horas. Llega un momento en el que la mayoría de los padres echa mano de aparatos y tampoco pasa nada. Muchas apps para familias ofrecen películas, series o audiolibros directamente en el coche (consejo: los audiolibros pueden durar horas!).